En un giro inesperado en el debate laboral, el sindicato mayoritario Valorian ha emitido una carta formal dirigida a la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, desmintiendo sus recientes declaraciones sobre las condiciones laborales en El Corte Inglés. Esta respuesta surge después de que Díaz anunciara que la Inspección de Trabajo revisaría las jornadas de los empleados durante la temporada de rebajas. La carta, firmada también por CCOO y Fetico, expresa preocupación por la falta de verificación de información y critica la validación de datos provenientes de un sindicato con escasa representación.
En plena estación de cambios, la tensión entre la ministra de Trabajo y el principal sindicato de El Corte Inglés ha escalado rápidamente. Miguel Venegas, presidente de Valorian, ha explicado en una entrevista que, aunque los trabajadores están obligados a realizar 44 jornadas laborales ampliadas al año, estas no son de 10 horas como se había sugerido, sino de 9 horas. Además, ha aclarado que esta extensión máxima no es uniforme en todas las regiones españolas, ya que algunas tienen horarios más reducidos.
Sobre el trabajo en domingos y festivos, Venegas destacó que desde el año 2000 se han implementado medidas para limitar y compensar estos días laborables. En ese entonces, muchos trabajadores realizaban labores sin restricciones ni compensación, pero tras negociaciones, se estableció una compensación económica en 2013, lo que redujo significativamente el número de domingos y festivos trabajados. Actualmente, en zonas con apertura generalizada, este porcentaje ha disminuido al 33% anual.
Además, Venegas subrayó que los incentivos para los empleados son transparentes, aunque pueden existir discrepancias en cuanto a su cuantía. Desde 2022, El Corte Inglés es pionero en pagar incentivos a trabajadores de productos perecederos. Valorian también está comprometido a extender estos beneficios a toda la plantilla en el futuro.
Desde una perspectiva periodística, este intercambio revela la importancia de verificar cuidadosamente la información antes de hacer afirmaciones públicas, especialmente en temas tan sensibles como las condiciones laborales. La comunicación abierta y honesta entre autoridades laborales y sindicatos es crucial para mantener un equilibrio justo en el lugar de trabajo. Este incidente sirve como recordatorio de la necesidad de trabajar conjuntamente para mejorar las prácticas laborales y garantizar que las voces de todos los trabajadores sean escuchadas y respetadas.