En el seminario, los participantes han reflexionado profundamente sobre cómo se cubre la guerra y cómo se utiliza el lenguaje. La Reina, con su intervención, ha puesto de manifiesto la importancia de contar las historias de los conflictos que a menudo quedan en la sombra. "Si hubiera personas contando qué está sucediendo en el norte de Etiopía, en Sudán, eso ¿serviría?" preguntó, mostrando su preocupación por las guerras no contadas.
Fran Sevilla, corresponsal de RNE, respondió creyendo que Sudan es "un absoluto olvido" y que la sociedad no necesita saber porque no hay intereses allí. Sin embargo, la Reina puso en duda esto y preguntó si es bueno que las personas que están empezando a formar un criterio no sepan que el mundo es tan grande y complejo.
Se ha hablado también del hecho de que el lenguaje bélico no se limita solo a las guerras. Ha salido a otras esferas de la vida, como en la pandemia o con las enfermedades. La Reina ha mostrado interés en estas reflexiones y ha contado cómo ella evita utilizar un lenguaje bélico con las personas que tienen cáncer.
"Evito siempre eso; porque si la persona que tiene un diagnóstico, además, tiene que sentir que batalla con algo cuando eso es un proceso, por el que pasas que puede terminar de una manera u otra…", ha dicho, destacando la importancia de ser cuidadosos con el lenguaje en diferentes contextos.
La Reina Letizia ha puesto de manifiesto la necesidad de contar las historias de los conflictos. No solo es importante para recordar lo que ha pasado, sino también para evitar que se repitan historias similares en el futuro. Cada conflicto es único y merece ser contado de manera precisa y objetiva.
El seminario ha sido un espacio importante para debatir sobre estos temas y para reflexionar sobre cómo podemos mejorar la manera en que contamos las historias de los conflictos. La Reina ha sido un líder en este proceso, mostrando su compromiso con la divulgación de la información y la comprensión de los conflictos.