En una entrevista realizada a mediados del 2024, Lomma compartió detalles íntimos sobre su experiencia durante el embarazo y los cambios que experimentó en su vida. Destacó el aumento significativo de peso durante este período y cómo esto afectó su percepción personal. Sin embargo, también expresó un profundo sentimiento de renovación y felicidad en la etapa actual de su vida, enfatizando su crecimiento personal y bienestar.

A lo largo de su embarazo, Lomma notó un cambio considerable en su cuerpo, sumando 24 kilos. Este proceso le hizo sentirse desconectada de sí misma, una reacción común entre muchas mujeres durante este tiempo. A pesar de estos desafíos, Lomma encontró momentos para reflexionar y redescubrir su identidad más allá de los cambios físicos. Reconoció que cada etapa tiene su propio valor y que era importante aceptarse tal como estaba.

Tras el nacimiento de Melanie, Lomma se centró en recuperar su equilibrio emocional y físico. En lugar de verse presionada por las expectativas sociales, decidió tomar el tiempo necesario para ella misma. Esta decisión permitió que gradualmente se sintiera más cómoda con su nuevo yo, celebrando cada pequeño logro en su camino hacia el autocuidado. Su hija se convirtió en una fuente de inspiración constante, motivándola a ser la mejor versión de sí misma.

Hoy en día, Lomma vive con una sensación de plenitud y alegría inigualable. Se siente más ligera y amorosa consigo misma, atribuyendo este cambio positivo a su capacidad de adaptarse y evolucionar. Mira hacia el futuro con optimismo, esperando continuar creciendo y mejorando en todos los aspectos de su vida. Esta nueva fase representa no solo un renacimiento físico sino también un florecimiento emocional y mental.