El 21 de enero de 2025, el Programa de Atención Médica Integral (PAMI) lanzó una campaña informativa sobre los principales síntomas y cuidados para prevenir enfermedades cardíacas en adultos mayores. Con más de 5 millones de afiliados, PAMI se esfuerza por mejorar la calidad de vida de sus miembros a través de diversos programas médicos y sociales.

Detecta Temprano, Actúa Rápido: Tu Corazón Te Lo Agradecerá

Síntomas de Enfermedades Cardíacas Comunes

Las enfermedades del corazón pueden manifestarse de diversas formas, siendo crucial identificarlas a tiempo para evitar complicaciones graves. Entre las señales más frecuentes destacan el dolor en el pecho, fatiga extrema, dificultad para respirar y sudoración inusual. La insuficiencia cardíaca congestiva puede evidenciarse con hinchazón en las piernas y tobillos, mientras que las arritmias suelen presentar latidos irregulares o acelerados. Los profesionales de PAMI enfatizan la importancia de buscar ayuda médica de inmediato ante cualquier señal sospechosa.La detección temprana de estas condiciones puede marcar la diferencia entre una vida plena y problemas de salud severos. Por ejemplo, un paciente que reconoce rápidamente los síntomas de un infarto de miocardio tiene mayores probabilidades de recibir tratamiento efectivo y salvar su vida. El dolor en el pecho que se irradia al cuello o brazos, acompañado de sudoración y falta de aliento, son signos inequívocos que no deben ignorarse.

Cuidados Preventivos Esenciales

Prevenir enfermedades cardíacas requiere una combinación de hábitos saludables y chequeos médicos regulares. Una alimentación balanceada, rica en frutas, verduras y proteínas magras, reduce significativamente el riesgo cardiovascular. Además, reducir el consumo de sal y grasas saturadas es fundamental para mantener la presión arterial y los niveles de colesterol dentro de rangos saludables.La actividad física regular también juega un papel crucial. Caminatas de al menos 30 minutos, tres veces por semana, pueden fortalecer el corazón y mejorar la circulación sanguínea. Para aquellos que encuentran difícil iniciar un régimen de ejercicios, incluso actividades cotidianas como subir escaleras o hacer tareas del hogar pueden ser beneficiosas. El control médico periódico es otro pilar esencial, incluyendo chequeos de presión arterial, colesterol y niveles de azúcar en sangre.

Hábitos Saludables y Manejo del Estrés

Evitar el tabaco y limitar el consumo de alcohol es vital para mantener un corazón sano. Fumar incrementa el riesgo de enfermedades cardiovasculares, mientras que el alcohol en exceso puede causar hipertensión y arritmias. Además, el manejo del estrés a través de técnicas de relajación como la respiración profunda o la meditación puede disminuir la carga sobre el sistema cardiovascular.La salud bucodental también tiene un impacto directo en el corazón. Personas con problemas valvulares deben mantener una higiene oral adecuada para prevenir infecciones que puedan afectar el funcionamiento cardíaco. Vacunarse contra enfermedades como la neumonía, gripe y COVID-19 es otra medida preventiva importante, ya que estas infecciones pueden desencadenar complicaciones en individuos con condiciones preexistentes.

Riesgos y Factores Modificables

Factores como la edad avanzada, la hipertensión, el colesterol alto, el sedentarismo, la diabetes y el tabaquismo aumentan el riesgo de enfermedades cardíacas. Controlar estos factores puede hacer una gran diferencia en la salud del corazón. Por ejemplo, un adulto mayor con antecedentes familiares de cardiopatías debe ser especialmente vigilante y seguir estrictamente las recomendaciones médicas.En resumen, la prevención de enfermedades cardíacas en la tercera edad es posible mediante una combinación de hábitos saludables y atención médica regular. Conocer los síntomas, adoptar estilos de vida preventivos y buscar ayuda profesional cuando sea necesario, son pasos cruciales para mantener un corazón fuerte y saludable.