En esta historia, un individuo comparte su experiencia con sustancias ilícitas durante sus años jóvenes. Su relato, revelado en una entrevista en 2012, destaca cómo las drogas se volvieron una parte integral de su vida social y personal. Desde el consumo inicial de marihuana y alcohol hasta la experimentación con medicamentos controlados y finalmente heroína, este recorrido ofrece una visión cruda del mundo de las adicciones.
En aquellos tiempos de juventud, las fiestas eran el escenario donde todo comenzaba. En un ambiente festivo y despreocupado, las sustancias prohibidas fluían con facilidad. Según el testimonio, era común que alguien ofreciera drogas sin pedir nada a cambio. El inicio fue con pastillas como el éxtasis, que rápidamente llevaron a la exploración de otros estupefacientes más fuertes. Los medicamentos controlados fueron el siguiente paso, seguidos por cocaína y, finalmente, la heroína. Cada etapa marcó un punto de inflexión en su vida.
Desde una perspectiva periodística, este testimonio nos brinda una mirada profunda sobre cómo las adicciones pueden arraigar en la vida de una persona. Nos invita a reflexionar sobre las consecuencias a largo plazo y la importancia de la prevención y el apoyo para quienes se encuentran en situaciones similares. Este relato es un recordatorio de lo vulnerable que puede ser la juventud ante tentaciones que parecen inofensivas al principio.