El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, ha desmentido informaciones sobre posibles modificaciones a su política arancelaria. Según declaraciones recientes, el magnate asegura que las noticias publicadas por medios estadounidenses son falsas y no reflejan sus intenciones reales. Por otro lado, se reporta que los asesores de Trump están explorando planes arancelarios selectivos, que afectarían solo a sectores considerados críticos para la seguridad nacional o económica. Esta situación ha generado incertidumbre en los mercados financieros internacionales.
Donald Trump ha emitido un comunicado categórico negando cualquier modificación a su estrategia arancelaria. En una plataforma social, el futuro líder del país afirmó que las informaciones publicadas por ciertos medios son incorrectas y forman parte de lo que él califica como "noticias falsas". Trump subrayó que su compromiso con las políticas comerciales anunciadas durante su campaña sigue intacto y que no hay planes para limitar la aplicación de aranceles a ciertos sectores específicos.
Las declaraciones del presidente electo llegaron en respuesta a informes que sugerían que sus asesores estaban considerando aplicar aranceles solo a importaciones vitales para la economía y seguridad del país. Este enfoque representaría un cambio significativo respecto a las promesas realizadas durante la campaña presidencial. Sin embargo, Trump enfatizó que estas especulaciones son infundadas y que su gobierno seguirá adelante con las medidas anunciadas previamente, incluyendo la imposición de aranceles del 10% sobre todas las importaciones mundiales a Estados Unidos y tasas adicionales sobre productos chinos.
A pesar de las negaciones de Trump, fuentes cercanas al equipo de transición indican que se están evaluando planes arancelarios más selectivos. Estos planes apuntarían a proteger sectores clave considerados esenciales para la seguridad nacional y económica del país. Los detalles exactos de estos planes aún no han sido finalizados, pero se espera que incluyan áreas estratégicas identificadas por el equipo de Trump.
Según las fuentes, los sectores que podrían verse afectados incluyen la cadena de suministro industrial de defensa, suministros médicos críticos y producción de energía. Específicamente, se mencionan aranceles sobre materiales como acero, hierro, aluminio, cobre, jeringas, agujas, viales, materiales farmacéuticos, baterías, minerales de tierras raras y paneles solares. Además, se ha informado que un documento del equipo de transición recomendaba imponer aranceles a todos los materiales relacionados con vehículos eléctricos, con el objetivo de impulsar la producción local y negociar exenciones con aliados. Esta medida responde a preocupaciones sobre la dependencia de China en la extracción y refinado de minerales críticos, lo que se considera una vulnerabilidad estratégica para Estados Unidos.