La esposa de Rafael Tudares, Mariana González, ha emitido un comunicado urgente en el que denuncia la desaparición forzada de su esposo por parte de agentes estatales. A 48 horas del incidente, la preocupación y la incertidumbre se han intensificado. González ha visitado diversas instituciones gubernamentales buscando respuestas y garantías legales para su familia. Ella sostiene que la detención es una represalia política contra su padre, Edmundo González, y enfatiza la inocencia de su esposo.
Mariana González ha utilizado sus redes sociales para exigir información sobre la ubicación y estado de salud de su esposo, Rafael Tudares. Desde el martes 7 de enero, ha recorrido distintos centros de seguridad en busca de respuestas, acompañada de su abogado. Sin embargo, hasta el momento no ha recibido ninguna confirmación oficial sobre su paradero o condiciones de detención.
González ha reiterado que su esposo no tiene vínculos con actividades políticas y que su desaparición es una medida punitiva contra su padre. La falta de comunicación y acceso a su ser querido viola derechos fundamentales establecidos en la Constitución. Enfatiza que incluso el derecho a una llamada telefónica le ha sido negado, lo cual aumenta su angustia. La familia exige justicia y transparencia en este caso.
Mariana González ha denunciado públicamente que la desaparición de su esposo es una respuesta a las supuestas acciones políticas de su padre, Edmundo González. A pesar de las afirmaciones de funcionarios gubernamentales que intentan vincular a Rafael con otros detenidos, González afirma categóricamente que su esposo no ha participado en ningún acto ilegal ni político. Esta situación subraya preocupantes violaciones a los derechos humanos.
La familia insiste en que la presunción de inocencia debe respetarse y que las acusaciones contra Rafael son infundadas. González ha solicitado urgentemente que se informe sobre el lugar de detención y el estado de salud de su esposo. Además, ha declarado que seguirá luchando por la libertad y los derechos de Rafael Tudares, apelando a la comunidad internacional y a organizaciones de derechos humanos para que intervengan y ayuden a esclarecer esta situación.