El cantante recordaba vívidamente aquel día en que las emociones estaban al rojo vivo dentro de la casa del reality show. Un incidente trivial, relacionado con un producto básico como la mermelada, se convirtió en el detonante de una reacción exagerada. El artista confesó que sintió que estaba perdiendo el control, alcanzando un punto crítico donde cualquier detalle, por insignificante que fuera, podía provocar una explosión.
Después de un altercado verbal con otro participante, decidió refugiarse en el baño para intentar recomponerse. Sin embargo, el ambiente cargado de tensión no cesaba. Su rival, Davi Brito, quien finalmente se coronaría como el ganador de la edición, comenzó a elevar la voz dirigiéndose hacia Buda. Este comportamiento agresivo intensificó aún más la presión que ya sentía el cantante. En ese instante, se encontraba al límite, listo para enfrentarse si la situación llegaba a su punto máximo.
Fue en ese preciso momento cuando Fernanda, demostrando una sabiduría y compostura excepcionales, intervino. Con una calma admirable, supo leer la situación y comprendió que era crucial actuar rápidamente para evitar un conflicto mayor. Su voz firme pero serena logró penetrar en la mente del cantante, quien estaba sumido en un estado de agitación extrema.
Las palabras de Fernanda fueron precisas y contundentes. Repitió su nombre, llamándolo a la razón, instándolo a mantener la calma. Esta intervención fue fundamental para romper el ciclo de escalada emocional. Aunque Davi se acercó y gritó algunas palabras ininteligibles, el cantante solo pudo mirarlo fugazmente antes de que la situación se desvaneciera. En ese instante, el cantante sintió una profunda gratitud hacia Fernanda, quien había sido el ángel guardián que lo mantuvo en el camino correcto.
A posteriori, el cantante expresó su agradecimiento no solo hacia Fernanda, sino también hacia una fuerza superior que lo guió en ese momento crítico. Reconoció que su reacción podría haber tenido consecuencias graves si no hubiera recibido esa intervención oportuna. Este episodio le enseñó valiosas lecciones sobre la importancia de mantener la compostura y buscar soluciones pacíficas ante situaciones de estrés extremo.
Esta experiencia dentro del reality show dejó una huella indeleble en la vida del cantante. Más allá de la competencia y los reflectores, aprendió la verdadera importancia de contar con aliados que puedan ofrecer apoyo en momentos difíciles. Además, reflexionó sobre la necesidad de encontrar mecanismos internos para manejar la presión y evitar reacciones impulsivas que podrían llevar a situaciones irreparables.