En la víspera de asumir el cargo como el próximo mandatario, Donald Trump convocó a miles de partidarios en el Capital One Arena de Washington, D.C., para presentar su visión de “recuperar Estados Unidos”. Durante este evento, que contó con una asistencia masiva pese al clima adverso, el presidente electo reafirmó sus promesas y anunció medidas drásticas para los primeros días de su gobierno. Entre las propuestas destacan acciones en materia de inmigración, medio ambiente y política interna, así como indultos para algunos involucrados en el asalto al Capitolio. La ceremonia oficial de investidura se realizará el lunes en el Capitolio, pero Trump ya adelantó que retornará al estadio para saludar a sus seguidores.
El discurso de Trump estuvo marcado por un tono de renovación y cambio. El líder enfatizó en poner fin a lo que describió como cuatro años de declive nacional y dar inicio a una era de fortaleza y prosperidad. Con más de 15,000 personas en el auditorio, el futuro presidente subrayó su intención de adoptar más de cien decretos en sus primeros días en el poder. Estas medidas incluirían cerrar las fronteras a la inmigración ilegal, implementar deportaciones masivas y reducir las protecciones ambientales para facilitar la explotación de recursos naturales. Además, se comprometió a derogar varias políticas del gobierno anterior rápidamente.
La presencia de figuras cercanas al presidente electo, como miembros de su familia, el actor Jon Voight y el empresario Elon Musk, añadió un toque simbólico al evento. Aunque Musk no ofreció un discurso significativo, su participación representó el respaldo de ciertos sectores empresariales a la agenda de Trump. Los videos proyectados durante el mitin criticaron las políticas de diversidad e inclusión impuestas recientemente, aspectos que Trump prometió revertir. También enfatizó en restaurar la ley y el orden en las ciudades estadounidenses y regresar a un sistema basado en méritos.
El fervor entre los asistentes era palpable. Personas como Shah Mahdi, un camionero originario de Wisconsin, expresaron su confianza en que Trump cumplirá sus promesas, basándose en acciones anteriores del político. Además, ciudadanos extranjeros, incluyendo un grupo de canadienses, viajaron para ser parte de este momento histórico, apoyando las políticas migratorias y de seguridad fronteriza del líder. En cuanto a política exterior, Trump mencionó su compromiso con la doctrina de “América Primero”, prometiendo terminar conflictos internacionales y prevenir una tercera guerra mundial.
Con la ceremonia oficial programada para el lunes, Trump anticipó que volvería al estadio para interactuar con sus seguidores y posiblemente firmar sus primeros decretos como presidente. Su segundo mandato se perfilaba desde ya como una etapa polémica y decisiva para el país. Este retorno al escenario público marcaría el comienzo de una nueva era bajo su liderazgo, llena de cambios y desafíos.