A pesar de que la temporada aún no había comenzado, el fichaje del experimentado piloto Lewis Hamilton por la escudería italiana Ferrari se convirtió en el tema central del mundo de la Fórmula 1. Este movimiento trajo consigo una serie de cambios significativos para el equipo y los demás participantes. En particular, afectó directamente al futuro del piloto español Carlos Sainz, quien finalmente dejó Ferrari a finales del año. Aunque Sainz se había convertido en un elemento clave para la estructura del equipo, su salida fue inevitable tras la llegada del siete veces campeón mundial. Además, las opiniones críticas de Bernie Ecclestone, figura histórica del campeonato, añadieron más controversia al asunto, sugiriendo que la relación entre Hamilton y Ferrari podría ser breve.

La incorporación de Hamilton a Maranello ha sido objeto de debate desde su anuncio. Apenas habían transcurrido unas pocas jornadas de pruebas cuando Ecclestone expresó su escepticismo sobre la duración del contrato de dos años firmado por el británico con la Scuderia. Según el antiguo dirigente, el heptacampeón no logrará cumplir con su compromiso debido a diversos factores internos del equipo. Ecclestone argumenta que la decisión de contratar a Hamilton puede haber sido impulsiva y que, aunque el piloto tiene un historial impresionante, esto no garantiza su éxito dentro de Ferrari. Además, señala que el equipo ya cuenta con Charles Leclerc, un compañero de equipo que habla el mismo idioma y goza de mayor apoyo interno.

El entorno en Ferrari siempre ha estado marcado por una clara jerarquía, lo que podría poner a Hamilton en una posición desfavorable frente a Leclerc. Según Ecclestone, esta dinámica interna podría dificultar la adaptación del nuevo piloto, independientemente de sus logros pasados. El exdirectivo también sugiere que la falta de nuevos retos podría estar afectando la motivación de Hamilton, lo cual podría influir negativamente en su rendimiento. A pesar de las expectativas generadas por su fichaje, Ecclestone cree que Hamilton seguirá enfrentándose a numerosos obstáculos dentro del equipo italiano.

La llegada de Hamilton a Ferrari representa un cambio significativo tanto para el piloto como para la escudería. Mientras que algunos ven en este movimiento una oportunidad para revitalizar la carrera del británico, otros, como Ecclestone, anticipan desafíos considerables. La relación entre Hamilton y Ferrari será seguida de cerca durante los próximos meses, ya que determinará si el siete veces campeón podrá encontrar su lugar en un equipo con una cultura bien establecida y un sistema de jerarquía consolidado. Las palabras de Ecclestone resaltan la complejidad de este nuevo capítulo en la historia de la Fórmula 1.