En la primera carrera que logró terminar este 2025, Fernando Alonso alcanzó su mejor posición hasta ahora, ubicándose en el undécimo lugar. Aunque estuvo cerca de los puntos, a menos de tres segundos del décimo puesto ocupado por Bearman, el rendimiento del Aston Martin sigue siendo un desafío. En una Fórmula 1 cada vez más competitiva en la mitad del pelotón, equipos como Racing Bulls, Williams y Haas superan al equipo británico, mientras que la disputa con Alpine es intensa. El piloto español ofreció una visión honesta sobre las dificultades actuales del AMR25 y destacó la necesidad de avances significativos para competir.
El domingo en Suzuka fue todo menos aburrido para Alonso. Durante la primera parte de la carrera, enfrentó presiones constantes de rivales como Gasly y Yuki Tsunoda, quienes estaban muy cerca en términos de tiempo. "No podíamos cometer errores ni en una sola curva", explicó Alonso, subrayando la exigencia de la competencia. Reconoció que su equipo carece del ritmo necesario para estar consistentemente entre los diez primeros y mencionó que incluso pequeñas ventajas técnicas podrían marcar una diferencia significativa.
Además, hizo hincapié en la naturaleza dual de Suzuka como circuito. Aunque muchos lo consideran emocionante debido a sus desafiantes curvas, Alonso señaló que las carreras modernas allí no siempre son tan dinámicas como se esperaría. “Es difícil ver adelantamientos sin cambios estratégicos en los neumáticos”, reflexionó. También criticó suavemente a los aficionados que protestan cuando los neumáticos no duran lo suficiente o cuando no hay suficiente agarre, sugiriendo que disfrutar del deporte podría ser más constructivo que quejarse.
Respecto al futuro inmediato, Alonso enfatizó la importancia de analizar todos los datos recopilados hasta ahora. “Necesitamos revisar cada detalle para entender por qué no estamos donde deberíamos estar”, afirmó. Bahréin será una nueva oportunidad para aprender de las primeras tres carreras y seguir desarrollando el coche.
Inspirándose en el triunfo de Verstappen con un Red Bull aparentemente inferior, Alonso reconoció similitudes con su propia experiencia. Recordó cómo luchó por títulos mundiales con vehículos que no eran los mejores, especialmente en 2012. A pesar de las dificultades, resaltó que realizar grandes premios perfectos es extremadamente complicado y requiere tanto habilidad como estrategia.
Con un tono optimista pero realista, Alonso cerró su análisis destacando la necesidad de mejorar continuamente. Su perspectiva no solo refleja las dificultades actuales del equipo, sino también su determinación para avanzar. A medida que la temporada progrese, el desafío será adaptarse rápidamente y encontrar soluciones innovadoras para elevar el rendimiento del Aston Martin.