Actualmente, solo 10 provincias han logrado digitalizar la información nominal de cada alumno en los tres niveles de educación obligatoria. Estas provincias incluyen CABA, Chubut, Córdoba, Entre Ríos, Jujuy, La Pampa, La Rioja, Mendoza, San Luis y Santa Fe. Mientras que otras provincias aún están trabajando en ello. Esto muestra la importancia de avanzar en la digitalización de la información educativa.
Además, el Sistema Integral de Información Digital Educativa (SInIDE) fue creado hace 12 años, pero solo a partir de 2021 se ha dado un gran impulso a su expansión. Durante la pandemia, se ha dado un mayor énfasis en la implementación de estos sistemas.
Los sistemas de información y gestión educativa son un instrumento clave para contar con datos actualizados del ausentismo y las calificaciones de los estudiantes. De esta manera, se pueden hacer un seguimiento más preciso de las trayectorias escolares.
Al brindar datos actualizados sobre inasistencias y desempeño de cada alumno, estos sistemas permiten desarrollar sistemas de alerta temprana (SAT). Estas herramientas informáticas pueden predecir qué estudiantes están en riesgo de abandonar sus estudios y poner en marcha acciones preventivas.
Existen varios desafíos para la consolidación de un sistema de información educativa nominal a nivel nacional. Las asimetrías en la cobertura son un problema, ya que mientras 10 provincias ya tienen “nominalizada” toda su matrícula, hay dos provincias que no cuentan con datos de los alumnos de escuelas privadas.
Otro desafío es el uso de la información. Aunque el acceso y la utilización de los datos se concentra en los ministerios y los equipos directivos, no llega a los docentes. Esto muestra la necesidad de mejorar la comunicación y la colaboración entre todos los actores involucrados.
A pesar de los desafíos, se han dado importantes avances en la implementación de los sistemas de información y gestión educativa. Por ejemplo, varias provincias han desarrollado herramientas propias, como el sistema GEM en Mendoza.
Además, el Ministerio de Educación creó en 2021 una base de datos nacional (la “Base Nacional Homologada”), que integra la información de los estudiantes de cada provincia. Esta base de datos alcanzó una cobertura del 84% de la matrícula de todo el país en 2023.
En resumen, los sistemas de información y gestión educativa son una herramienta esencial para el seguimiento estudiantil y la mejora de la educación. Sin embargo, aún hay mucho trabajo por hacer para superar los desafíos y avanzar en la implementación de estos sistemas.