Además, el Comité contra la Desaparición Forzada de las Naciones Unidas ha manifestado su preocupación por la situación de las instituciones a cargo de la identificación de los cuerpos. Afirman que los recursos materiales y humanos disponibles no permiten dar una respuesta a la demanda. Esto ha planteado serios desafíos de coordinación frente a la multiplicidad de autoridades involucradas.
También se ha señalado que no se presentaron pruebas para confirmar la existencia de estos 20 mil cuerpos. Esto ha generado más dudas y ha llevado a la búsqueda de más información para aclarar la situación.
La delegación del Comité ha sostenido 55 reuniones con más de 80 autoridades de todos los poderes públicos y 61 reuniones con víctimas, colectivos de víctimas y organizaciones de la sociedad civil. Esto demuestra la importancia que tienen estas reuniones en la búsqueda de la verdad y la resolución de la situación.
También se ha señalado que el reclutamiento forzado afecta a personas de todas las edades, especialmente a niños, niñas y adolescentes. Esto es una situación de gran preocupación y requiere una acción rápida para resolverla.
Además, la falta de coordinación entre las diferentes autoridades involucradas puede dificultar el proceso de identificación y la búsqueda de la verdad. Esto requiere una mayor colaboración y un esfuerzo conjunto para resolver la situación.
En resumen, la situación actual es una controversia y una desafío para la sociedad colombiana. Se requiere una acción rápida y una colaboración entre las diferentes instituciones para resolver la situación y encontrar la verdad detrás de estos 20 mil cuerpos sin identificar.